Yo miraba tu puerta. Cerrada
Esperando un centímetro de movimiento
Con un centímetro me alcanzaba
Podría haberme aferrado cuantos años más…
Pero después rechinó otra puerta
Y me distrajo ese ruido
Me animé a girar la cabeza
(Un poquito nada más eh)
Yo no quería traicionarnos
De repente…
Tu nombre se me hizo tan pequeño
Todo por ese gigante
Apoyado sobre el marco de la puerta de mi cocina
Mirándome cocinar
Dijo que la ensalada se veía hermosa
Que los suspiros se veían hermosos
Y que mejor te deje ir
Que bueno, que ya pasó, que ya está
Y sabrás perdonarme?
Porque creo que ahora le creo
Y que si vos ya lo hiciste
Y yo no podía
Y capaz ahora puedo
Capaz esta vez es de verdad y me sale
No pienses que lo planeé
Yo te dibujé de azul tantas veces
Te vi azul y verde tantas veces
Que así, aunque joven
Ya no me alcanza la vida
Para dibujarlo a él.
Pero me dijo que puedo cantarle
Y por ahí nos salga bien
Yo sé que vos pensaste…
Yo sé que yo te dije para siempre
Pero me dolían las piernas de seguirte
Siga a ese taxi! Siga a ese taxi!
Pero nunca te alcanzábamos…
“… Me quedo por acá nomás yo
En este barrio
Sí, chofer, mejor frene
No tengo ganas de ir a ningún otro lado…”
(Egon, de nuevo)
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