lunes, 31 de agosto de 2020

Un supermercado en Neuquén

 

¿Es que a ustedes no les parece que están muertos?

¡Como he pensado en ti esta noche Walt Whitman!

Porque no pasa nada...

Porque sí, me celebro

¿A qué precio Walt?

¿Cuán preciada es la paz?

¡Es que no pasa nada!

Y a la vez todo…

EXISTO

estoy, suena el teléfono

suena, suena

es nadie, no es nadie

EXISTO

respiro, está bien, estoy bien

¿A qué precio Walt?

Pasaron muchos días,

Valoro las casas, pero son siempre las mismas

EXISTO

No desespero, estoy tranquila

Veo todo, los veo a todos

Te veo Walt,

Voy hacia, como aceitunas

EXISTO

Utilizo el tiempo, sonrío bastante

Aprendo, todo el tiempo estoy aprendiendo

SOLO en la interioridad

…nos sentiremos solos



https://www.youtube.com/watch?v=kwrYDTHKxiE


Un supermercado en California - ALLEN GINSBERG 

Cómo he pensado en ti esta noche, Walt Whitman,
mientras caminaba por las callejuelas, bajo los árboles,
con dolor de cabeza, ensimismado en la contemplación
de la luna llena.
¡En mi hambrienta fatiga, y para comprar imágenes,
entré en el supermercado de frutas, soñando con tus enumeraciones!
¡Qué duraznos y qué penumbras! ¡Familias enteras
comprando de noche! ¡Pasillos llenos de maridos! Esposas
en las paltas, bebés en los tomates!; y tú García Lorca,
¿qué hacías allí, junto a las sandías?
Te vi, Walt Whitman, sin niños, solitario viejo harapiento,
hurgando entre las carnes en el refrigerador, y
mirando a los muchachos de la carnicería.
Oí las preguntas que le hacías a cada uno de ellos:
¿Quién mató las costillas de cerdo? ¿A qué precio las
bananas? ¿Eres mi Angel?
Anduve alternativamente por las brillantes pilas de
latas, siguiéndote, perseguido en mi imaginación por el
policía del negocio.
Juntos recorrimos los abiertos corredores de nuestra solitaria
fantasía, probando alcauciles, gozando de cada una
de las heladas golosinas,
y sin pasar nunca por la caja.
¿A dónde vamos Walt Whitman? Las puertas se cerrarán
dentro de una hora. ¿Hacia dónde apunta tu barba
esta noche?
(Toco tu libro, y sueño con tu odisea en el supermercado
y me siente absurdo.)
¿Caminaremos toda la noche por las calles solitarias? Los
árboles añaden sombra a las sombras, las luces de las casas
se apagaron, nos sentiremos solos.
¿Pasearemos soñando con la perdida América del amor
al lado de automóviles azules en las carreteras, camino
hacia nuestra silenciosa casita?
Ah, padre querido, barba gris, solitario y viejo maestro
del valor,
qué América tuviste cuando Caronte dejó de impulsar
tu barca y tú descendiste a una humeante orilla observando
cómo desaparecía la balsa sobre las negras aguas
del Leteo?

(Trad. de W. Shand y A. Girri)

jueves, 27 de agosto de 2020

Entonces

Intentaba escribir pero las letras no salían,

no me salen.

No soy. ¿Quién sería yo sin la forma de las letras?

¿Quién yo sin la forma?


Yo, de fondos,

que ahora me muerdo las manos de miedo;

a no entender mis propias letras

, a no entender mis propias formas


Dicen que con creatividad…

De qué o quién si ni sé quien soy.

¿de qué me puedo acordar?

¡Ay! ¿O es que todo recuerdo duele?

¡Ay! En serio cuesta respirar,

que no queda agua en el vaso

¡Ay! ¿Qué va a pasar con mis letras si me paro a buscar?

¿Quién voy a ser cuando vuelva?

¿Quién si dejo de tener sed?


Voy a escribir un punto .

                                        Entonces pude irme, entonces ya no tuve sed.



Goya



He aquí un gran secreto...

Cuando voy tras aquello que a mi parecer es lo que deseo,
mis días transcurren en ansiedad y angustia.

Pero cuando me siento a esperar en el sitio de la paciencia,
aquello que necesito fluye hacia mi sin ningún pesar.

De esto deduzco que aquello que yo deseo
también me desea a mí.

He aquí un gran secreto para todo aquel
que pueda comprenderlo...".

Rumi 



viernes, 7 de agosto de 2020

Viernes 3am


Me desperté a una hora, que hasta las plantas duermen
Las noticias no eran alentadoras: desdicha, carencia, miseria... seguía:
- que no está bien, que no estoy bien, que no va a estar bien

La panza se me retorcía, en este abismo
No hay salida/
la única salida que conozco es la de siempre, la que no quiero: la huida

Volver mejor atrás, no mirar más

Mi ser flora como etéreo ante este viento,
Donde llevará? Llegará? Llegaré?

-•-

Siempre vienen las preguntas y siempre estoy para ellas en mi reino

-•-
Que es más complejo, que yo no lo entiendo y que no es un trámite
Amor, la vida no es canto
Yo lo sabía, aunque de mi no esperaras escucharlo

-•-

Esta noche es mía,
un pan con queso y me tengo
Sentada al borde de mi cama, sosteniendo
Ojalá, algún día, el amor sea eterno.


tan obvio que duele, o es belleza



Carta a Georges Izambard | 13 de mayo de 1871

Charleville, 1871.

¡Querido Señor!

Aquí está otra vez profesor.
Se lo debemos a la Sociedad, me ha dicho; usted forma parte del cuerpo docente: va por el buen camino. — También yo sigo el principio: me dejo mantener cínicamente; desentierro antiguos imbéciles de colegio: todo lo que puedo inventar de estúpido, de sucio, de malo, en acción y palabra, se lo entrego a ellos: me pagan con jarras de cerveza y mujeres¹ — Stat mater dolorosa, dum pendet filius². — Me debo a la sociedad, es justo y tengo razón. — También usted tiene razón, hoy por hoy. En el fondo y bajo su principio, usted sólo ve poesía subjetiva: su obstinación de volver al estante universitario, — ¡perdón! — ¡lo prueba! Pero siempre terminará como un satisfecho que no hizo nada, ya que no quiso hacer nada. Sin mencionar que su poesía subjetiva siempre será terriblemente aburrida.
Un día, espero, — muchos otros esperan lo mismo, veré en tu principio poesía objetiva, ¡Y la veré con mayor sinceridad de lo que usted haría! — Seré un trabajador: esta es la idea que me detiene, cuando la enloquecida ira me empuja hacia la batalla de París — ¡donde tantos trabajadores siguen muriendo mientras te escribo! Trabajar ahora, nunca, nunca; estoy en huelga.
Ahora, me encrapulo³ lo más posible. ¿Por qué? Quiero ser poeta, y estoy trabajando para hacerme vidente: no lo entendería en absoluto, y casi no podría explicárselo. Se trata de llegar a lo desconocido mediante el desarreglo de todos los sentidos.
Los sufrimientos son enormes, pero hay que ser fuerte, haber nacido poeta, y yo me he reconocido como poeta. No es culpa mía en absoluto. Está mal decir: Yo pienso: deberíamos decir: Se me piensa — Perdón por el juego de palabras. —
Yo es un otro. Tanto peor para la madera que se descubre violín, ¡y desafía al inconsciente, que ergotiza sobre lo que ignora por completo!
No eres un maestro para mí. Le regalo esto: ¿es sátira, como usted diría? ¿Es poesía? Es siempre fantasía. — Pero, se lo ruego, no subraye con lápiz ni — demasiado — con el pensamiento:

LE CŒUR SUPPLICIÉ
Mon triste cœur bave à la poupe …

Esto no quiere decir nada. — RESPÓNDAME: casa del Sr. Deverrièver, para A. R.

Saludos de corazón,

Art. Rimbaud

domingo, 2 de agosto de 2020

Agosto fue mucho mejor el año pasado




Que el fin es el comienzo ; el duelo.
Suma a mi sentir;
miamor, yo vine a vivir.
Aquí dolió, aquí reí.
Tanto al fin/ yo así no podía vivir.
Y quiero más,  a la vez que no es ahí.
Aquí duele y toca vivir.
Después del amor, despedir.





Lamento no saber de quien es la fotografía, le agradezco por su trabajo acompañando al mío 





2019

Seguro tu piel
seguro la mía
de lejos
se gritan cosas lindas

Maru Salemi





El lujo del encuentro

Dejemos de ser dos humanos, para ser dos almas Dejemos los cuerpos, fusionemos en solo uno Dejemos también el tiempo, sé mi eterno instante ...